San Mateo 25:31-42
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: Cuando venga el Hijo del Hombre, rodeado de su gloria, acompañado de todos sus ángeles, se sentará en su trono de gloria. Entonces serán congregadas ante Él todas las naciones, y Él apartará a los unos de los otros, como aparta el pastor a las ovejas de los cabritos y pondrá a las ovejas a su derecha y a los cabritos a su izquierda.
Entonces dirá el Rey a los de su derecha:
“Vengan, benditos de mi Padre; tomen posesión del Reino preparado para ustedes desde la Creación del mundo; porque estuve hambriento y me dieron de comer, sediento y me dieron de beber, era forastero y me hospedaron, estuve desnudo y me vistieron, enfermo y me visitaron, encarcelado y fueron a verme”
Los justos le contestarán entonces:
“Señor, ¿Cuándo te vimos hambriento y te dimos de comer, sediento y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos de forastero y te hospedamos, o desnudo y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o encarcelado y te fuimos a ver?”
Y el Rey les dirá:
“Yo les aseguro que cuando lo hicieron con el más insignificante de mis hermanos, conmigo lo hicieron”
Entonces dirá también a los de la izquierda:
“Apártense de Mí, malditos; vayan al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles; porque estuve hambriento y no me dieron de comer, sediento y no me dieron de beber, era forastero y no me hospedaron, estuve desnudo y no me vistieron, enfermo y encarcelado y no me visitaron”
Entonces ellos le responderán:
“Señor, ¿Cuándo te vimos hambriento o sediento, de forastero o desnudo, enfermo o encarcelado y no te asistimos?”
Y Él les replicará:
“Yo les aseguro que cuando no lo hicieron con uno de aquellos más insignificantes, tampoco lo hicieron conmigo. Entonces irán éstos al castigo eterno y los justos a la vida eterna.”
Mi propósito semanal
Esta semana haré una visita a un enfermo, y le daré de comer a alguien que lo necesite.
¿Qué aprendiste hoy?
En el tiempo en que Jesús vivió en la tierra, algunos hombres no lo querían y lo mandaron crucificar. En la cruz de Jesús, alguien colocó un letrero que decía: “JESÚS REY DE LOS JUDÍOS” Esto lo hicieron para burlarse de Él, pero no sabían que estaba diciendo la verdad, pues Jesús es realmente el REY DE TODOS.
Jesús sufriendo en la cruz, se preocupó y amó a los demás, perdonó al ladrón que restaba junto a Él y le prometió llevarlo al cielo.
Jesús es el Rey del Universo.
Elaborado por:
Maestra Rosa del Carmen Marroquín
Área de Educación en la Fe